¿Qué es la decoración wabi sabi? El poder de la imperfección

Entre todas las tendencias que reflejan la influencia que el mundo oriental tiene en occidente hoy en día, se encuentra un estilo decorativo: la decoración wabi sabi. Un estilo que está triunfando en este lado del mundo porque proporciona mucho más que estancias bonitas y agradables. 

El wabi sabi busca la felicidad y, para ello, se centra en la sencillez, la austeridad, la calidez, la naturalidad y la imperfección. 

Como podrás imaginar, este estilo procede de Japón y, aunque es imposible su traducción, wabi sabi define mucho más que un estilo decorativo: es un estilo de vida. Te desgranamos su significado y características más importantes. 

Decoración wabi sabi: simplicidad y calidez 

Lo primero que debes saber sobre el estilo decorativo wabi sabi es que es una clara apuesta por los espacios sencillos y cálidos. Dos características detrás de las que la filosofía wabi sabi cree que se encuentra la felicidad. 

Sin llegar a ser un estilo minimalista, el wabi sabi busca la simplicidad, siempre sobre las bases de la humildad y la sobriedad. Este estilo asume que la vida no es perfecta y el ser humano tampoco y, por tanto, la decoración tampoco debe serlo, así que huye de las pretensiones de perfección que podemos encontrar en otros estilos. 

Se puede decir que el wabi sabi huye del minimalismo al que estamos acostumbrados porque no apuesta por un espacio blanco, simétrico, pulcro y brillante. En cambio, sí que se preocupa porque los elementos presentes en una estancia sean los imprescindibles. 

Para decorar un salón al estilo wabi sabi, debes suprimir de la decoración todo aquello que no sea realmente relevante, incluidos los colores. Decorar con lo imprescindible, haciendo que cada elemento presente en el salón realmente cuente. 

La calidez se obtiene mediante los puntos de luz repartidos por la estancia y, cómo no, con la incorporación de una chimenea. El fuego le da calor, vida, un ambiente hogareño y mucha intimidad al salón. 

En búsqueda de lo auténtico y único

Como ya adelantamos, el estilo wabi sabi en la decoración no pretende la perfección. Huye de ella, porque no cree que sea natural, así que se centra en buscar lo auténtico y lo único, características que encuentra en la imperfección.

Las piezas elegidas para la decoración wabi sabi son irrepetibles, escapando por completo de la frialdad de los elementos construidos en serie. Esto se refleja no solamente en los muebles, sino también en las paredes, las puertas y el resto de elementos que conforman la decoración. 

La imperfección, los pliegues, las rugosidades, el óxido y la desnudez de los materiales le otorgan aleatoriedad a la estética de los objetos, y esto hace que sean únicos. 

En una vivienda de estilo wabi sabi no es raro ver las paredes rugosas, sin pulir; los muebles con acabados rústicos y las vajillas artesanales. Todos estos detalles y su asimetría le otorgan una personalidad irrepetible a la decoración. 

Wabi sabi: una oda a lo orgánico

No podemos hablar de wabi sabi sin prestar atención especial a lo orgánico del estilo. Si hemos hablado de que busca que cada elemento decorativo cuente y cumpla una función y de que busca la unicidad en la imperfección, los detalles naturales y orgánicos no podían faltar. 

Los estilos decorativos de origen oriental siempre han apostado por la naturaleza en sus diseños: plantas decorativas, muebles de madera, todo tipo de textiles orgánicos... El wabi sabi también se une a ellos y se caracteriza por todos estos elementos.

El yute, la madera y el bambú son los principales materiales utilizados en el mobiliario y la decoración wabi sabi. Además de aportar naturalidad, estos materiales, cuando no son procesados, cumplen a la perfección con la búsqueda de autenticidad del estilo. 

Por otro lado, tenemos que hablar de los textiles, también muy presentes en el wabi sabi, entre los que encontramos el algodón, la lana o el lino. 

Los colores elegidos para estos materiales y tejidos no son ostentosos ni estridentes. Buscando la máxima conexión con la parte más sobria de la naturaleza, el estilo wabi sabi apuesta por colores suaves, como el marrón, el beige o el blanco. En ocasiones, incluso podrían rozar el adjetivo de colores apagados: grises, verdes muy suaves…

Con esta escasa variedad cromática y la elección de materiales naturales, desgastados y sencillos, el wabi sabi es un estilo que busca la tranquilidad y la felicidad en las cosas más simples. La creencia es que estas características proporcionan libertad y tienen un poder regenerador para el cuerpo y la mente. ¿Y tú? ¿Te atreves a basar la decoración de tu hogar en el estilo wabi sabi?

Y para crear un ambiente de lo más relajante, que acompañe a la perfección el estilo Wabi Sabi, te dejamos nuestra lista de Spotify: "Relax en casa"